Les presentamos a Rodrigo Sosa, alumno de nuestra escuela oriundo de la ciudad de Dolores, que brinda su testimonio sobre lo que es su experiencia con nosotros:
“La verdad, lo primero que sentí cuando me subí al avión fue mucha emoción. Esa sensación de volar, de ser libre, de decir ¡quiero ser piloto!…increíble.”
“Lo que me llevó a ser piloto es que, de chico, yo me acuerdo de ver un avión pasar y decir, bueno, quiero ser el piloto”. “Me enteré de Papa Charlie por algunos conocidos. Empecé a ver cómo se manejaban y la calidad de instrucción.”
“La expectativa de Papa Charlie era muy alta. Y en verdad es más de lo que yo esperaba, sobretodo en el tema de infraestructura, el equipo, el material, los aviones…la verdad que aviones fenomenales, en buen mantenimiento, buen cuidado.”
